Aprender a montar a caballo
Puedes comenzar a cualquier edad, pero evidentemente cuanto antes mejor, las edades perfectas para empezar y recibir las primeras clases serían con 8 ó 9 años, aunque siempre con un jinete experto adulto o profesor de equitación. Los caballos para el aprendizaje no son cualquiera, son caballos entrenados para ello, más dóciles, dispuestos a obedecer y que no se asustan con facilidad.
La destreza
A todo esto, y a pesar de lo emocionante que puede ser aventurarse a galopar en caballo, montar a caballo, por ejemplo, haciendo una ruta a caballo por Andalucía, no es de las actividades más fáciles que existen. Dominar correctamente y con fluidez esta destreza puede llegar a ser muy difícil, puesto que pueden interferir muchos factores, como la habilidad del jinete, el tipo de caballo, los recorridos que se hacen, entre otros.
Preparación del jinete
Nosotros como aprendices de ésta nueva destreza, debemos contar con ciertas aptitudes que nos hagan capaces de asumir la dirección del caballo, aptitudes tanto físicas como mentales. La mejor opción para aprender, es hacerlo en una academia, una escuela especializada donde se cuente con todos los materiales para montar a caballo de forma segura, además, se puede contar con instructores con experiencia que hagan el proceso de aprendizaje más sencillo.
Montar y cabalgar
Antes de dar el salto al caballo, se debe estar preparado mentalmente, se debe tratar de mantener la mayor calma y confianza posible, para no transmitirle inseguridades al animal. Para comenzar, se recomienda contar con la ayuda de otra persona que sujete la rienda del caballo. Si el caballo resulta ser muy alto, se puede buscar un banco o taburete para logar subir. Una vez encima se debe mantener una posición adecuada, con la espalda recta, las piernas hacia adentro y cuidando la dirección que se le da al caballo con la rienda para que no realice un movimiento brusco.
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