Con calor y a comer caldo |
Posted: June 1, 2022 |
Hoy les voy a hablar de mi sopa preferida, para ser más específica, de mi caldo favorito. Deben saber que en México comer caldo aún cuando estamos a 40 grados de temperatura ambiente es algo muy común. Las mamás no se andan con cuentos cuando de alimentar a la famila se trata. Mi madre era una de esas. Vivíamos en un pueblo costeño en el estado de Colima, donde las altas temperaturas te derriten hasta el maquillaje más resistente y donde sientes que 22 grados son suficientemente fríos para disfrutar un rico caldo de res o mole de olla. Así que a mi madre no le imporataba que yo y mis hermanos regresáramos de la escuela practicamente con las suelas de los zapatos humeando y la espalda bañada de sudor a causa del terrible calorón que hacía. Ella ya nos esperaba con un plato lleno de verduras y carne de res sumergidas en un caldo con chile humeante y vaporoso. Yo y mis hermanos escondíamos la verdura bajo el mantelito individual y sin chistar nos zampábamos el mole de olla con su carnita mientras sudábamos a mares por el calor y el chile de la sopa. No les voy a decir que no extraño eso. Con calor y todo, esas memorias de infancia son una de las cosas más preciosas que tengo en la vida.
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