Tipos de extintores Extintor de agua: para incendios de clase A y B extintor de agua Compra un extintor de agua Los extintores de agua contienen un aditivo emulsionante que hace que el agua sea más penetrante, para una mejor eficacia en la lucha contra las llamas. Además, conducen a la formación de una película compacta sobre la superficie del producto en combustión, lo que permite aislarlo del aire y detener la alimentación del fuego. Sin embargo, tenga cuidado de no recibir proyecciones, ya que el aditivo es irritante . Por lo tanto, este tipo de extintor es muy efectivo en incendios de clase A y B. Los extintores de agua deben ser inspeccionados cada año y someterse a una revisión visual al menos cada 6 meses. Extintor de polvo: para fuegos de clase C, A y B extintor de polvo Compra un extintor de polvo El extintor de polvo contiene un producto químico que actúa sofocando las llamas , a la vez que aísla el combustible. Son los extintores más rápidos a la hora de extinguir incendios . Son la solución más eficaz para fuegos de gas de alta intensidad ( clase C ) pero también para fuegos de clase A y B. La otra ventaja de los extintores de polvo es que son los únicos dispositivos que se pueden utilizar en condiciones de temperatura negativa . El polvo abrasivo mezclado con agua tiene el inconveniente de penetrar en las más pequeñas asperezas y puede provocar corrosión (sobre todo en instalaciones eléctricas). Además, su uso genera el nacimiento de nubes de polvo muy irritantes, reduciendo la visibilidad . Finalmente, el polvo contenido en el cuerpo del extintor está sujeto a compactación, por lo que se recomienda no exponer demasiado el dispositivo a vibraciones (en vehículos, por ejemplo). Los extintores de polvo clase D son específicos para cada combustible (tipo de metal por tanto). Extintor de gas: para fuegos de clase B y E extintor de gas Compra un extintor de gas Al reducir drásticamente el nivel de oxígeno en el aire , el gas contenido en el extintor de gas (muy a menudo dióxido de carbono) sofoca el fuego . Mantenido a presión en estado líquido, y por lo tanto a baja temperatura, actúa también por enfriamiento (aunque de forma relativa con respecto al agua y la espuma). Dado que el gas que sale está relativamente frío (aproximadamente -75/-80 °C), existe un riesgo de congelación relacionado con el uso de esta categoría de extintor. Es por eso que el difusor está hecho de goma para que sea posible agarrarlo. El dióxido de carbono, al ser más ligero que el aire por encima de 179°C, explica la necesidad de cubrir adecuadamente toda la superficie ocupada por las llamas, para que el gas pueda actuar. Sin embargo, el uso de un extintor de CO2 es eficaz sólo contra pequeños fuegos de gas, líquido o sólido, cuando estos son de poco espesor , para fuegos de clase B y E.
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